Pesadillas.
La pesadillas a las tres de la mañana.

En los últimos tiempos, ha sido algo común despertar a las tres de la mañana de una pesadilla, y en ocasiones hasta sufrir un ataque espiritual a esa hora, y la razón tiene que ver con la hora de las brujas. Originalmente la hora de las brujas era las doce de la noche, ya que es la hora en que hay mayor oscuridad, pero durante los últimos años han surgido nuevos ritos de brujería, como los palo mayombe, que en realidad es una mezcla de santería y satanismo, y aunque han cambiado el nombre de sus deidades, no es difícil descifrar de quienes se trata. El punto es que según ese rito, la mejor hora para hacer sus brujerías en las tres de la mañana por la razón de que supuestamente es lo contrario a la hora en que murió Jesús (las tres de la tarde), otras versiones dicen que los paleros suelen hacer sus rituales entre las 3:33 hasta las cinco de la mañana. El punto es que si despertamos a las tres de la mañana, es porque nuestro ángel de la guarda nos ha hecho despertar, con el fin de evitar que nos roben energía, por lo que, lo ideal es quedarse despierto al menos unos quince minutos o preferentemente una media hora. Aunque hemos llegado a ver casos de ataques muy fuertes que llegan a prolongarse durante horas, caso en que es necesario usar un arma psíquica, ya sea un cuchillo bien afilado con la punta hacia arriba a un lado de la cama, preferentemente del lado izquierdo, que es por donde atacan los espíritus malignos o hasta uno de cada lado. Ya que el metal afilado suele lastimar a los espíritus malignos, quienes poseen una especie de membrana de energía, pero que al entrar en contacto con un metal afilado, suele causarles heridas, y los hace perder energía rápidamente, razón por la cual huyen despavoridos, pues si se quedaran sin energía, quedarían atrapados en una especie de limbo.