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Es común escuchar hablar de las hadas, incluso se han escrito muchos cuentos sobre ellas, pero en la realidad, ellas son Ángeles que acuden a ayudarnos cuando
estamos en dificultades, o simplemente porque les gusta ayudar. En el caso de las hadas madrinas, ellas son Ángeles de la guarda, y nos pueden ayudar si
creemos en ellas.
Algo que puede ayudarnos a que las hadas estén cerca de nosotros, es traer un dije con la imagen de un hada, pero es importante que si el dije es de metal,
sea de oro, de otra forma, es mejor conseguir un dije de otro material, y en ese caso tratar de conseguir uno que sea de un color brillante.
Dije de oro con la figura de un hada.
Hay una hadita muy conocida que se llama Roseta. Ella era una princesita que vivió en un reino cerca de Inglaterra y a ella le gustaba mucho ayudar a las personas;
además de ser bella y muy simpática, por eso todas las personas del reino la querían mucho.
Roseta vivió en la época del rey Arturo, incluso eran vecinos, ya que Arturo vivía en el reino de alado.
Un día Roseta partió de este mundo, y se convirtió en un ángel muy especial gracias a sus méritos.
En una ocasión unos niños que jugaban cerca de una cascada, vieron que una mariposa los seguía, pero luego, cuando se acercaron a ella, y vieron más de cerca, se dieron
cuenta que era una niña con alas de mariposa que los saludaba amablemente, y después, cuando regresaron a casa le contaron a todos lo que habían visto, sin omitir detalle alguno,
entonces, quienes conocieron a Roseta, supieron que era ella, por las descripciones de los niños, y desde entonces todos la recuerdan de esa forma.
Arriba vemos la imagen de unas bellas cascadas.
A las hadas y en especial a Roseta, les gustan los jardines y las cascadas, porque cuando Roseta era niña, le agradaba jugar en una cascada que se encontraba cerca del castillo
donde vivía.
En seguida vemos la figura de un hada que es muy parecida a Roseta
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