En realidad, todos soñamos absolutamente todos los días, de hecho tenemos al menos cinco sueños por noche, aun cuando no los recordemos
todos. Incluso, hay veces que no recordamos ni uno. La razón principal es porque los sueños se graban en nuestra memoria en los
primeros minutos y a veces segundos, luego de que despertamos, por lo que si nos despertamos apurados, estiramos los brazos o variamos
la respiración, suele provocar que nuestros sueños se olviden de inmediato. De modo que si queremos recordar nuestros sueños,
lo ideal es que al despertar, nos quedemos quietos por unos minutos, mientras se graban en nuestra memoria a largo plazo.